Amigos de la reflexión

martes, 1 de septiembre de 2015

Mirando a la nada

Es en lugares mágicos, únicos y de gran inmensidad donde descubres lo pequeño que eres dentro de un universo tan gigantesco como es el que conocemos. Son lugares que consiguen hacerte olvidar todo lo que te preocupa o cualquier problema que quisiera hacerte una visita.
Lugares que logran que te quedes inmóvil, sin palabras, simplemente sonriendo y mirando a la nada. Y, es ahí, justo en ese instante, en el que apuntas tu vista a la nada, miras al horizonte y, ¿por qué no? Eres FELIZ.
Porque muchas veces nos centramos en lo material o en la cantidad, cuando en realidad lo que realmente nos hace felices es aquello tan bello y simple como lo que naturaleza nos ha regalado. Por ello, mira más a la nada, disfruta del viaje y sonríe.